- La Vieja Guardia

Casi el 40% de las parejas se conoce a través de Internet

Fecha: 14 feb 2019

La era de Internet ha hecho que nos sea más fácil ligar a través de la red y más complicado hacerlo en persona. Quizás porque es más sencillo expresar nuestros sentimientos tras una pantalla, o porque, simplemente, hemos perdido la costumbre de hablar, y también flirtear, con alguien a quien acabamos de conocer en un bar o en una fiesta. La cuestión es que las redes sociales se han convertido en un arma en el noble arte de la seducción, un arma que, en ocasiones, puede parecer de doble filo.

Tal y como recoge un estudio llevado a cabo por los sociólogos Michael Rosenfeld y Sonia Hause, de la Universidad de Standford, y Reuben Thomas, de la Universidad Estatal de Arizona, el 39 por ciento de las parejas heterosexuales y el 60 por ciento de las homosexuales se conocieron gracias a Internet. De modo que, en 2017, la forma más frecuente de conocer a otras personas era a través de un dispositivo móvil. Un porcentaje que, según Fast Company, se ha visto incrementado de forma sorprendente, teniendo en cuenta que en 1995, las personas que encontraban el amor a través de plataformas digitales solo representaban el 2 por ciento del total.

Sin embargo, según Francesc Núñez, sociólogo y profesor de Estudios de Arte y Humanidades de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), se sigue encontrando el amor como lo hacían nuestros padres y nuestros abuelos pero las redes sociales han cambiado la arquitectura de la elección de pareja. “Internet ha roto barreras como la de clase o la de etnia y ahora puedes elegir entre centenares de perfiles. Esto implica una ampliación pero también un refinamiento de los criterios a la hora de escoger a nuestra pareja”, explica el sociólogo. Lo que conlleva, según Nuñez, que sigamos buscando e, incluso, pensando que podemos encontrar a alguien mejor.

En este sentido, el profesor destaca que la aparición de las redes sociales y de plataformas destinadas a encontrar pareja ha facilitado el proceso. Pero también existen consecuencias negativas como, por ejemplo, que el flirteo inicial sea a través de una pantalla y que no se tengan aspectos tan importantes como la comunicación no verbal. “Puede parecer más sencillo, porque no estás dando la cara, puedes esconder tu vergüenza, tienes tiempo para responder, para editarte”, apunta el profesor, y añade que “ligar desde tu casa implica también no tener que mostrar las emociones o, por otro lado, poder ser más atrevido”.

Volviendo a los datos, según el estudio antes citado, 24 años atrás, el 9 por ciento de las parejas se conocía en la universidad. Una cifra que ahora se ha reducido hasta llegar al 4 por ciento. Esto no significa que los adolescentes no estén interesados en buscar el amor –o una relación puramente sexual–, sino que van a buscarlo a otros sitios como, por ejemplo, a aplicaciones de citas. Y es que, según Nuñez, los jóvenes han nacido con estas herramientas y, por lo tanto, no suponen un inconveniente para ellos.

El sociólogo catalán también explica que este tipo de ‘apps’ se ha colado en nuestros dispositivos y en nuestras vidas y han conseguido mercantilizar el amor, convertirnos en simples mercaderías. Aún y así, es incuestionable el éxito de aplicaciones como Tinder, que cuenta con cerca de 300 millones de descargas a nivel mundial y con más de 4 millones de suscriptores. La plataforma, además, en fechas señaladas ve incrementada su actividad. Un claro ejemplo de ello es el día de San Valentín del año pasado, cuando aumentaron un 23 por ciento las descargas de la ‘app’ en España y ésta registró uno de los mayores niveles de actividad del año.

Fuente: La Vanguardia