- La Vieja Guardia

Descubren el ojo más antiguo del mundo

Fecha: 16 dic 2017

Un equipo de científicos ha descubierto lo que podría ser el ojo más antiguo del mundo. El hallazgo se ha producido en Estonia y se trata de un fósil de 530 años de antigüedad perteneciente al extinto trilobites.

Este animal, cuyo nombre científico es Schmidtiellus reetae, habitó durante la Era Paleozoica hace entre 251 y 541 millones de años, y era una especie de antecesor de arañas y cangrejos con caparazón duro que vivía en aguas costeras.

Gracias al descubrimiento, se ha podido conocer un poco mejor la interesante evolución del sentido de la visión. El ojo no presenta grandes diferencias con este órgano en la actualidad, por lo que nos indica que la estructura ocular no ha variado apenas en quinientos millones de años.

Dicho miembro estaba parcialmente desgastado, lo que permitió estudiar el interior, conocer su estructura y funcionamiento, así como las diferencias con los ojos modernos.

La autora principal del estudio profesora Brigitte Schoenemann de la Universidad de Colonia, Alemania, asegura que “este puede ser el ejemplo más antiguo de un ojo que sea posible encontrar. Los especímenes más viejos en las capas de sedimentos debajo de este fósil contienen solo rastros de los animales originales, que eran demasiado suaves para fosilizarse y se habrán desintegrado con el tiempo”

La visión de de toda una era

El trilobites presenta un ojo con una forma primitiva compuesta; eso significa que era un órgano formado por unas 100 células visuales diminutas llamadas omatidios, similares a los una abeja actual. Además, el Schmidtiellus reetae curiosamente no tenía cristalino. Esto puede deberse a que el trilobites era una especie sin un caparazón adecuado para su formación.

"Este fósil excepcional nos muestra cómo los animales primitivos vieron el mundo a su alrededor hace cientos de millones de años", según el profesor Euan Clarkson de la Facultad de Geociencias de la Universidad de Edimburgo, uno de los autores del estudio.

Dicho miembro estaba parcialmente desgastado, lo que permitió estudiar el interior, conocer su estructura y funcionamiento, así como las diferencias con los ojos modernos.

La autora principal del estudio profesora Brigitte Schoenemann de la Universidad de Colonia, Alemania, asegura que “este puede ser el ejemplo más antiguo de un ojo que sea posible encontrar. Los especímenes más viejos en las capas de sedimentos debajo de este fósil contienen solo rastros de los animales originales, que eran demasiado suaves para fosilizarse y se habrán desintegrado con el tiempo”

El trilobites presenta un ojo con una forma primitiva compuesta; eso significa que era un órgano formado por unas 100 células visuales diminutas llamadas omatidios, similares a los una abeja actual. Además, el Schmidtiellus reetae curiosamente no tenía cristalino. Esto puede deberse a que el trilobites era una especie sin un caparazón adecuado para su formación.

"Este fósil excepcional nos muestra cómo los animales primitivos vieron el mundo a su alrededor hace cientos de millones de años", según el profesor Euan Clarkson de la Facultad de Geociencias de la Universidad de Edimburgo, uno de los autores del estudio.

vista lateral del ojo del trilobite

Los investigadores opinan que el trilobites tenía una visión más pobre en comparación con los animales actuales, pero que igualmente le habría permitido distinguir depredadores y evitar obstáculos. No obstante, años más tarde, el Schmidtiellus reetae de la costa báltica desarrollaría un ojo compuesto mejor y con una resolución de imagen mucho más alta que la que muestran los resultados del fósil.

Fuente: Muy Interesante.