- La Vieja Guardia

Filigrana de pitcheo de Yoanner Negrín

Fecha: 14 ago 2017

Póngale el calificativo aprobatorio que desee, pues bien eso y quizá un poco más mereció el pulcro trabajo monticular que realizó Yoanner Negrín para guiar a los Leones de Yucatán a una victoria por lechada sobre los Bravos de León, 2-0, al arrancar los pleiofs en el Parque Kukulcán Álamo.

Y es que el cubano llegó hasta la sexta entrada lanzando juego perfecto, el cual tras un aut en ese episodio se esfumó, tras firmar pasaporte. Doble matanza, tras esa base por bola solucionó todo e hizo que llegue hasta la octava retirando a sus adversarios en tres bateadores.

El cubano tuvo un día inspirador. El vasto repertorio que posee lo utilizó como quiso, incluso desde el arranque del duelo mostró que venía por todo, al grado de ponchar a los siete primeros que enfrentó. Soberbio, así se podía definir ese comienzo.

Finalmente, sólo permitió un sencillo, en la octava con uno fuera, y luego otorgó el segundo y último boleto libre de la noche, siendo la única vez que un adversario llegó a la segunda colchoneta. Rápido hizo los ajustes necesarios para colgar el cero e irse a descansar al dógaut, donde observó como el venezolano Ronald Belisario completó la lechada al retirar la novena, que incluyó dos ponches, pero igual dos imparables al cuadro. Eso fue todo el daño ofensivo que pudo hacer León.

También del lado de casa no fue prolífera la ofensiva. Igual sólo batearon tres indiscutibles, ante el derrotado Marco Quevedo, quien igual lanzó veneno puro, pero el juego se le fue de las manos cuando en el primer acto, Diego Madero disparó triple y anotó en diligencia de pisa y corre a batazo de Ronnier Mustelier.

El hermético duelo lo sentenció José Juan Aguilar al disparar doble que remolcó en el quinto rollo a Yuniesky Betancourt, embasado con sencillo y colocado en posición de anotar por sacrificio de Esteban Quiroz.

Fuente: William Sierra.