Dos polos opuestos, esos son Honduras y México. En la competencia para llegar al Mundial de Rusia, los mexicanos han validado su nivel en Norteamérica, Centroamérica y el Caribe. No son los gigantes, pero sí los mandones por el momento.El tri encara el último partido de la eliminatoria sin tener la calculadora a la mano, ya están clasificados, líderes e imbatibles. Los catrachos requieren ganar y esperan que Panamá se tropiece frente a Costa Rica.

Este martes (18.00 hora local y 19.00 en México) Honduras recibe al tri en el estadio Olímpico Metropolitano y con esto se vuelve a encender la hoguera de su enemistad. Los de la H han jugado una de sus peores clasificatorias para una Copa del Mundo. Sus únicas dos victorias han sido contra Trinidad y Tobago. Cuatro empates y tres descalabros. Esa colección de resultados les sitúa, en estos momentos, en el quinto puesto de seis. Tienen los mismos puntos que Panamá, 10, pero la diferencia de goles abre una brecha: -7 de los hondureños por -2 de los canaleros.

El anhelo de Honduras es aspirar a la repesca. Para ello requieren vencer a México y que Panamá no gane contra Costa Rica. Una combinación fortuita de resultados le daría el pase directo si gana, Panamá no suma y Estados Unidos pierde frente a Trinidad y Tobago. Si empatan con el tri, requiere que Panamá no triunfe para quedarse con el lugar de repechaje. Una derrota los marginaría automáticamente de Rusia.

La tensión para los hondureños aumentó luego de que Costa Rica les empatara en los últimos minutos, 1-1. Los dirigidos por Jorge Luis Pinto criticaron al arbitraje por agregar seis minutos de reposición. Los silbantes eran mexicanos.”Árbitro hijo de 60 mil putas. Seis minutos, cómo es posible. Árbitro, sos un sin vergüenza, cabrón”, escribió el jugador Carlo Costly. “Yo siento que no es correcta la determinación del árbitro, desde ningún punto de vista”, matizó el entrenador.

La proeza hondureña tendrá que ser consumada sin el delantero que les ha renovado la ilusión, Anthony Lozano, jugador del Barcelona B, quien tuvo una fractura en el rostro. Tampoco estará Carlo Costly, el autonombrado verdugo de la selección de México, debido a una fractura en una costilla. Las puntas de lanza serán Alberto Ellis y Rommel Quioto.

El equipo de México quiere concluir la eliminatoria mundialista sin perder un partido. La estrategia de Juan Carlos Osorio, pese a sus intermitencias, ha sacado réditos. El boleto para la Copa del Mundo lo consiguieron a falta de tres juegos. Los mexicanos aprovecharon la inestabilidad de la selección de Estados Unidos para arrebatarle el liderazgo en Concacaf.

Los de Osorio ganaron su más reciente partido 3-1 contra Trinidad y Tobago. Aunque el marcador aparente ser una victoria sencilla, el tri pasó un amargo episodio al verse limitado en las oportunidades al ataque y de encajar un gol en un contragolpe. El seleccionador dejó en el banquillo al jugador en plena forma física y mental, Hirving Lozano. Con él en el campo consiguieron el empate. La remontada llegó con los goles de Javier Chicharito Hernández y Héctor Herrera.

Los cuestionamientos a la estrategia de Osorio se basan en la nula convocatoria de laterales naturales. En este equipo mexicano se han empleado a defensas centrales, como Diego Reyes y Carlos Salcedo, por la banda derecha. En el mediocampo dota de funciones de contención a un creativo Héctor Herrera ávido de contribuir con la ofensiva.

Héctor Moreno, central y suplente en la Roma, dejó la concentración para recuperarse de una lesión. Los sustitutos serán Oswaldo Alanís, Hugo Ayala o Edson Álvarez. Frente a Honduras serán inevitables los cambios en el once inicial. Uno de los candidatos para romper el ríspido juego contra los centroamericanos es Elías Hernández.

Si México gana podrá alcanzar 24 puntos y consolidar una de sus mejores participaciones en las clasificatorias. Así se superaría el récord establecido por Ricardo La Volpe (2002-2006) con 22 puntos.

Fuente: El País