- La Vieja Guardia

​Sin paz y seguridad, no hay futuro

Fecha: 20 sep 2018

Por Marco Antonio Cortez Navarrete

El viernes 7 de septiembre pasado, en este mismo espacio de La Vieja Guardia, publicamos un artículo titulado “Yucatán, oasis de esperanza para miles de mexicanos”.

Afirmación nada descabellada si tomamos en cuenta –como señalamos en el aludido texto-, que la seguridad es, no tengo la menor duda, lo más importante que tiene esta entidad.

Es un baluarte -califiqué en esa ocasión-, y lo reitero, aún con los índices de ilícitos –muchos graves, reconozco- pero nada comparable con lo que está sucediendo en otros muchos estados del país, orillando incluso a sus habitantes a dejar sus hogares, negocios, trabajo y educación, para migrar a un destino donde encuentren paz, simplemente eso, paz y seguridad.

Ese lugar tiene nombre y está bien ubicado en la geografía nacional, se llama Yucatán, ubicado en el sector norte de la Península y compartiendo territorio con Campeche y con Quintana Roo, este último lugar, debemos precisar, sacudido severamente por la violencia en los meses recientes.

Ante este panorama y ya a unos cuantos días de que el nuevo gobierno local asuma la responsabilidad de velar por el presente y el futuro de los yucatecos, y en pleno proceso de transición de un gobierno a otro, la coordinadora del equipo de transición del gobierno entrante, abogada María Fritz Sierra deja muy en claro que “garantizar la tranquilidad de las familias es una es una prioridad para el mandatario electo”.

Profesional del derecho, madre de familia y excelente ser humano, Fritz Sierra asevera que es de vital importancia que el gobierno que tomará las riendas a partir del 1 de octubre tenga en su poder todos los datos e informes relacionados con el tema de la seguridad.

Y es que –volviendo al artículo del 7 de septiembre- la seguridad y la paz social son elementales, prioritarios, para que una sociedad pueda desarrollarse; sin estas características se inhibe todo, absolutamente todo, al grado de generar múltiples y complejos problemas que bien pueden deteriorar aún más el tejido social y llegar a niveles insospechados.

En la reunión entre los equipos de transición se abordaron temas relacionados con la seguridad pública, la prevención al delito y la procuración de justicia. Al frente del equipo del gobierno saliente estuvo Martha Góngora Sánchez, secretaria de gobierno, Luis Felipe Saidén Ojeda, titular de la SSP y Ariel Aldecua Kuk, fiscal del estado.

Desde mi muy particular y humilde opinión considero que una de las razones del éxito de la seguridad pública en Yucatán radica en el hecho de que la gran mayoría de los integrantes de los cuerpos policiacos y de inteligencia son nacidos en esta tierra, situación muy distinta a otras corporaciones que tienen elementos de diferentes lugares lo cual hacen más difíciles los conceptos de identidad y relación con los habitantes.

Dio gusto saber que la abogada Góngora Sánchez, a nombre de Rolando Zapata, gobernador saliente, manifestó su total disposición para proporcionar toda la información disponible y vale también la pena enfatizar que en esta reunión además de los funcionarios se contó con la presencia de representantes de la comunidad.

Observadores que fueron informados acerca de las acciones, los programas y las estrategias aplicadas en materia de seguridad. Además de Fritz Sierra e integrantes de la sociedad civil participaron Olga Rosas Moya, Lizbeth Basto Avilés, Alberto Reyes Carrillo y Víctor Hugo Lozano Poveda, todos representantes del gobierno de Mauricio Vila Dosal.

Por el gobierno saliente Gabriel Barragán y José Miguel García Vales y por la sociedad civil Michelle Byrne Rodríguez, delegada de la Cruz Roja Mexicana; Javier Acevedo, de la Coparmex; Luis Castillo Campos, CMIC; Beatriz Gómory Correa, FEYAC AC; Absalón Álvarez Escalante, director de la Escuela de Derecho de la Universidad Anáhuac Mayab; Silvia Medina Calero, de la Universidad Marista y el doctor en Derecho Carlos Macedonio Hernández, titular de la Facultad de Derecho de la UADY.

Es así como Yucatán, sus funcionarios salientes y entrantes, se preparan para asegurarse que la paz y la seguridad en estas hermosas tierras sigan reinando, y enfrentar con determinación y eficacia, en caso necesario, toda manifestación que amenace con alterar la paz, el principal tesoro de quienes habitamos esta tierra que día con día sigue recibiendo con los brazos abiertos a decenas, tal vez centenares de familias que todavía tienen y merecen el derecho de hacer algo útil y productivo con sus vidas.

Así sea….

Hasta la próxima