Cd. de México (octubre 2018).- Al cierre de septiembre, los ingresos excedentes del sector público ascendieron a 279 mil 763 millones de pesos, señalan datos de la Secretaría de Hacienda.

De acuerdo con los ingresos programados para el periodo que va de enero a septiembre, se estimaron ingresos totales por 3.5 billones de pesos, pero el monto observado sumó 3.7 billones.

Con el resultado, los ingresos totales del sector público fueron superiores en 7.9 por ciento a lo programado.

Pese a rebasar el monto programado, los ingresos totales al cierre del tercer trimestre del año son inferiores en 4.2 por ciento, en términos reales, a lo obtenido en el mismo periodo del año anterior.

En los mayores ingresos observados destacan los recursos provenientes por ingresos no petroleros, los cuales registran un acumulado de 713 mil 401 millones de pesos, monto 13.3 por ciento superior a lo estimado.

Además, estos ingresos registran un incremento de 15.2 por ciento real respecto a la cifra observada en igual periodo del año anterior.

En la parte no petrolera, la recaudación de impuestos alcanzó 2.3 billones de pesos, con lo que superó en 3 por ciento lo programado, aunque frente a lo recaudado el año anterior representa un avance marginal de 0.6 por ciento real.

Los ingresos no tributarios sumaron 204 mil 111 millones de pesos, 59 por ciento menos que el año anterior, pero superior en 78 por ciento a lo programado.

El lento avance anual de la parte impositiva de los ingresos se mantiene presionada por la baja recaudación del Impuesto Especial sobre la Producción y Servicios (IEPS) aplicable a combustibles, así como por el avance marginal del Impuesto Sobre la Renta (ISR), el gravamen de mayor pesos en la recaudación.

Por ISR, el Gobierno federal obtuvo 1.2 billones de pesos, sólo 1.2 por ciento por arriba de lo observado en el mismo periodo de 2017.

El IEPS registró una caída de 15.5 por ciento.

Sin contar el IEPS a combustibles y gasolinas, los ingresos tributarios alcanzan un crecimiento de 2.9 por ciento real.

Este impuesto ha sido empleado por el Gobierno federal como mecanismo de ajuste en el precio de los combustibles, con el fin de mitigar el impacto de fuertes variaciones en los precios.

Fuente: Reforma