- Busca refugio fresco: Si es posible, quédate en interiores con aire acondicionado o utiliza ventiladores para mantener una temperatura fresca en tu hogar.
- Viste ropa ligera: Usa ropa ligera, de colores claros y de tejidos transpirables para ayudar a mantener tu cuerpo fresco.
- Evita la exposición directa al sol: Si tienes que salir, trata de hacerlo durante las horas más frescas del día, como temprano en la mañana o tarde en la noche. Usa sombreros de ala ancha y protector solar si tienes que estar al sol.