Mérida, Yucatán, 20 de mayo de 2024 — Rolando Ortiz Araujo, un joven de 30 años con Trastorno del Espectro Autista (TEA), ha demostrado que la discapacidad no es un impedimento para alcanzar grandes metas. A pesar de enfrentar diversas dificultades, Rolando ha encontrado su propósito y pasión en la vida, convirtiéndose en un ejemplo de superación y perseverancia.

Rolando trabaja en una procesadora de carnes, una tarea que desempeña con dedicación y compromiso. Sin embargo, su contribución a la sociedad va más allá de su empleo. También es instructor de zumba y promotor de la inclusión, roles en los que se desempeña con entusiasmo y energía, inspirando a quienes lo rodean a aceptar y valorar la diversidad.

Además de su carrera profesional, Rolando ha logrado completar sus estudios en Trabajo Social, demostrando que con esfuerzo y apoyo, las barreras pueden ser superadas. Su título no solo representa un logro personal, sino también una herramienta para ayudar a otros, brindando apoyo y guía a personas en situaciones similares.

El camino no ha sido fácil para Rolando. Desde una edad temprana, ha tenido que enfrentar el acoso escolar y la ignorancia respecto al autismo. Sin embargo, con el apoyo incondicional de su familia y amigos, ha logrado superar estos obstáculos, utilizando su experiencia para educar y sensibilizar a la comunidad sobre el TEA.

El mensaje de Rolando es claro y poderoso: "Luchen por su meta". Su historia es un recordatorio de que la perseverancia y el apoyo pueden transformar vidas, y que cada persona, independientemente de sus desafíos, tiene el potencial de alcanzar sus sueños.