- La Vieja Guardia
A pocas horas de CDMX, en el estado de Veracruz, se encuentra la Reserva Ecológica Pancho Poza. Un lugar que te invita a relajarte con el sonido de la naturaleza y divertirte en sus albercas naturales de aguas muy frías y colores turquesa. Se trata de un pequeño paraíso poco conocido, pero que merece ir a explorarlo y sorprenderte con su belleza.
Veracruz es famoso por muchísimos atractivos como las bellas playas de la Costa Esmeralda, por el primer puerto marítimo de México, por sus Pueblos Mágicos o por sus zonas cafetaleras, tan solo por mencionar ejemplos. Pero todavía quedan rincones por explorar.
A menos de cuatro horas desde la Ciudad de México y a una hora de Xalapa, se encuentra la Reserva Ecológica Pancho Poza. Específicamente, en el municipio de Altotonga. Con más de 50 hectáreas de bosque de niebla, en esta joya poco conocida de Veracruz puedes ver el río color turquesa Pancho Poza, caminar por senderos naturales, nadar en pozas naturales y ver caídas de agua.
Foto: DaT un Break
En Destinos, platicamos con Eder Dodero, líder de la agencia de viajes Dat Un Break, sobre el tour guiado que ellos tienen a Pancho Poza. “Nosotros empezamos el tour a Pancho Poza por una entrada secreta, por el ojo de agua que alimenta el río Pancho Poza. De allí hacemos una caminata, siguiendo el caudal del río, de alrededor de 40 minutos hacia las pozas turquesa y la cascada”. nos explica.
Toma en cuenta que ir a Pancho Poza implica caminar por senderos complicados llenos de piedras y caminos resbalosos, mismos que te guían a los cuerpos de agua. El esfuerzo es grande, pero los paisajes y la experiencia de estar en la naturaleza valen cada minuto.
Eder nos dice que las pozas de esta reserva ecológica tienen diferentes alturas: hay unas que tienen un metro y medio de profundidad y otras que alcanzan hasta los dos metros y medio. Eso sí, como el clima del lugar es un poco frío, el agua siempre está helada, por lo que se recomienda visitar Pancho Pozas de marzo a junio para que te metas a nadar a gusto.
“Al llegar a las pozas, el color turquesa del agua te invita a nadar; sin embargo, el agua es muy fría, por lo que debes tomarlo en cuenta si quieres echarte un chapuzón. Una de las cosas más padres de Pancho Poza es el agua, al ser tan cristalina, te permite ver pececitos nadando”, Eder Dodero, guía de DaT un Break
En este tour caminarás a la orilla del río Pancho Poza durante unos cuatro kilómetros. Puedes atravesar un puente colgante de madera o, si eres más extremo, puedes ir por un camino más largo a bordo de una bicicleta y pedalear entre las formaciones caprichosas del terreno.
Sin importar que camino elijas llegarás a la poza principal, mejor conocida como “poza del cocodrilo”; es la más fotografiada de todas y se encuentra a 20 minutos de la entrada de la reserva ecológica. Si sigues el caudal, río arriba, vas a encontrar más pozas. "Cada una más impresionante que la anterior", nos comenta Eder.
Otra de las cosas que hacen a Pancho Poza un oasis natural es la cascada que tiene una caída de alrededor de 20 metros. Para llegar a esta caída de agua tendrás que caminar entre la densa vegetación, senderos delineados por piedras y hojas. Superado este camino te espera la cascada, lo primero que sentirás es la brisa del agua en tu rostro.
A un costado de la cascada hay un mirador. Tómate unos minutos para contemplar el paisaje y fotografiar el lugar. Caminando cuesta arriba encontrarás cascadas más pequeñas, pero de gran belleza.
Es importante mencionar que, si piensas ir a conocer este lugar, por ningún motivo tires basura o hagas daño a la naturaleza. Si vas con guía sigue sus indicaciones y, antes de comprar un bloqueador solar, verifica que sea biodegradable.